lunes

Amor prohibido en la pista de skate


Hubo miles de adaptaciones, es cierto. Se hicieron musicales y películas, versiones históricas o modernas y cada una aportó, con desigual grado de eficacia y arte, una mirada sobre el original. La trágica historia de los amantes de Verona vuelve una vez más a escena. Se acaba de estrenar en el Camarín de las Musas Julieta y Julieta, una variación al clásico de Shakespeare. La dramaturga y directora es Lorena Romanín, también creadora de Plan V, serie lésbica de culto que se emite por Internet y ya lleva dos temporadas.
Tal como inaugurara la película Romeo+Julieta (1996), aquella con un Leo di Caprio de camisa hawaiana y armado hasta los dientes que enamoraba a la angelical Claire Danes demostrando que se podía asimilar cada uno de los versos de Shakespeare al ambiente caldeado de las pandillas juveniles, en Julieta y Julieta también encontramos ese contrapunto de agresión y lirismo. Si la historia sigue interpelando a nuestra época de manera tan actual es también por cómo se entiende allí la violencia.
En Julieta y Julieta el espacio escénico está dispuesto en torno a una pista de skate. Dos grupos se disputan el derecho a usarla. Comparten códigos, comparten un mismo espacio físico y un mismo estado de violencia. Están las víctimas y los victimarios, abusos y provocaciones. También está “la ley” encarnada en un vigilante que, cachiporra en mano, se pasea evitando los disturbios que no puede ni se esfuerza en comprender. Y en ese marco está Julieta: adolescente díscola que sucumbe a un excesivo lirismo acorde a su edad y su predisposición anímica. Cita a Pizarnik y aspira a morir de amor.
También está Julieta: niña cuidada y bien, encerrada en su pequeño mundo rosado y claustrofóbico que sueña con algo que no se parezca a nada de lo que tiene. Y pareciera tenerlo todo. Y Julieta conoce a Julieta y nace lo prohibido. La veda para el encuentro de los amantes es por el sexo. Son dos chicas.
Julieta y Julieta propone un mundo exclusivamente adolescente, donde no hay adultos que decidan o aporten otra perspectiva. El abuelo o la nana sólo acompañan las decisiones de las Julietas. Un amor incuestionablemente prohibido termina desencadenando la tragedia. En el hallazgo y sorpresa por esta relectura del clásico es que descansa la gran apuesta de Julieta y Julieta.




Ficha técnica:
Dramaturgia y puesta en escena: Lorena Romanin
Con: Sofía Wilhelmi, Lucila Németh, María Elena Acuña, Pedro Pena, Emiliano Figueredo, Nicolás Deppetre, Laura Espinola, Eduardo Peralta, Agustina Barach, Martín Lavini, Santiago Fraccarolli, Rodrigo Barrena, Facundo Carmona.
Músicos en escena: Luis R. Diaz Muñiz, Cecilia Campos, Marina Moral
Escenografía: Carina Claramunt

Camarín de las Musas
Mario Bravo 960
4862 0655
Jueves 21 hs.


publicado en Tiempo Argentino, 25/10/2010

Para fanáticos de todas las edades


Parece una convención de minisuperhéroes. En realidad, estos niños vestidos con trajes en azul y rojo se amontonan en el teatro Ópera para ver la reposición de El hombre araña. Una superproducción para fanáticos de todas las edades que ya había sido estrenada el año pasado y que sólo estará en cartel un par de semanas. La historia de cómo el tímido Peter Parker se convierte en superhéroe arácnido vuelve a escena en la versión de Leandro Panetta. Los amantes de las historietas disfrutarán de la infinidad de citas a la estética del cómic. Desde el lenguaje —con el inconfundible registro de los doblajes de los sesenta— hasta por la proyección de numerosos pasajes de la mítica revista. Un homenaje de Marvel a los primeros números. Pero también en la utilización narrativa de los flash-backs, el sentido del humor y los encuadres cambiantes que modifican el punto de vista propios del género. Aquellos más pequeños —que accedieron a la historia a través de la saga fílmica— se encontrarán con una caracterización muy ajustada de los personajes tal como los conocieron en la pantalla grande: J.J. Jameson, Mary Jane, los tíos, Harry Osborn. Cada detalle está previsto cuidando no defraudar las expectativas de un público exigente, que busca corroborar aquello que ya conoce y ama. Así también, la caracterización de los enemigos del héroe está muy bien lograda. El doctor Octopus, Misterio, El hombre de arena, Lagarto y otros más se enfrentan al Hombre Araña con creatividad y recursos. Carlos Belloso resulta un perfecto “Duende verde” presentado en su doble personalidad de hombre de negocios y archienemigo volador. Las escenas de lucha cuentan con muy buenas coreografías, plenas de acción y efectos especiales. Aunque las terrestres suelen ser más efectivas, ya sea con los luchadores de catch como con los supervillanos. También resultan atractivas las escenas de vuelo. El hombre araña recorre la ciudad saltando de edificio en edificio, resuelto escénicamente con creatividad. La alternancia equilibrada entre escenas de acción y las que hacen avanzar la historia mantienen a los espectadores atentos los noventa minutos que dura la función. Y cuando finalmente la chica besa al héroe que cuelga cabeza abajo en la ya mítica escena, la platea estalla en aplausos de aprobación.



Ficha técnica:
Dramaturgia y dirección: Leandro Panetta
Con: Alicia Bellán, Carlos Belloso, Brenda Gandini, Gastón Ricaud, Adolfo Sánchez, Marcelo Xicarts
Acróbatas / Malabaristas: Germán Cabanas, Santiago Castello
Dirección musical: Fabio Zurita

OPERA
Corrientes 860
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 4326-1335
Entradas desde: $ 60,00 -
Viernes - 20:00 hs - Sábado - 15:00 hs y 18:00 hs - Domingo - 15:00 hs y 18:00 hs

publicado en Tiempo Argentino, 18/10/2010

miércoles

actores solidarios con la casa del teatro


En ocasiones una buena causa consigue aquello que a una superproducción le resultaría prácticamente imposible. Tal es el caso de lo sucedido el lunes pasado con la apertura de una nueva edición de Teatrísimo, un ciclo de teatro semimontado a total beneficio de la Casa del Teatro.
El público colmó la sala del Regina para ver a un elenco encabezado por Norma Aleandro, Pablo Echarri y Julieta Díaz. Por esa única vez se presentaría La opinión de Amy, un texto del inglés David Hare que nunca fue puesto en escena en nuestro país. Aunque contó con una escenografía plena de detalles y varios cambios de vestuario, la puesta de Jorge Azurmendi fue un semimontado clásico en tanto los actores, libreto en mano, daban algunos trazos de color a las líneas de sus personajes.
La opinión de Amy comienza cuando Esme, una reconocida actriz de teatro conoce a Robin, el futuro marido de su hija, apasionado realizador de televisión y cine. Este vínculo tan tirante y conflictivo se irá desarrollando con los años e irá trazando las grandezas y debilidades de ambos personajes. Norma Aleandro jugó con solvencia los vaivenes de Esme, componiendo a una completa diva en la intimidad. Gran parte de la obra consistía en los enfrentamientos verbales entre suegra y yerno, haciendo que en la lectura se explicitaran las posiciones de los personajes. Pablo Echarri buscó en la voz el ímpetu que el libreto insinuaba. Más problemas tuvo Julieta Díaz. Al poco de comenzar, perdió totalmente la marca pero supo sortear con buen humor el escollo y continuar con la función. El público fue muy cálido con cada aparición de una nueva figura en escena. Sin embargo, el aplauso cerrado se lo llevó Lydia Lamaison ni bien pisó el escenario. Un merecido reconocimiento a su trayectoria. La opinión de Amy contó también con Aldo Barbero y Mariano Martínez interpretando personajes que, no por ricos dejaban de ser secundarios. Con una lógica más ligada al cine, lo de Martínez estuvo cercano a un cammeo apareciendo recién en el último acto para interpretar a un joven y carismático actor. Teatrísimo 2010 continúa todos los lunes de octubre y noviembre en el teatro Regina convocando otros elencos y directores de primera línea para textos que ya son verdaderos clásicos.



Ficha técnica:
La opinión de Amy, de David Hare
Con Norma Aleandro, Julieta Díaz, Pablo Echarri, Lydia Lamaison, Aldo Barbero, Mariano Martínez
Versión de Fernando Masllorens y Federico González del Pino
Vestuario: Renata Schussheim
Dirección: Jorge Azurmendi
Teatro Regina
Avenida Santa Fe 1235

martes

a Carlos Pacheco seguro no le pasa...

Luego de mi reseña, un joven director de teatro se sintió en la obligación de enviarme el siguiente mail. Cito textual:
"2 cosas: 1° no vengas mas a ver espactaculos q yo dirijo, no la pasas bien, no te gustan, no entiendo para q lo haces.
2° esto es personal: lo q escribis q no te gusta es lo q a mi me gusta, escribis feo y sos fea."

What?

El inmenso poder de la paranoia


Clara es un ama de casa. Su marido ha desaparecido sin dejar rastros. Ella asume entonces que fue víctima del terrorismo y, secundada por su hermana, se lanza en una cruzada mediática paranoide. Como era de esperar, el discurso del miedo gana adeptos vertiginosamente y Clara accede a la categoría de celebridad: tapas en las revistas, noticieros y almuerzos en televisión. Brevemente, esta es la trama de La Persuasión de Erica Halvorsen que Luciano Cáceres dirige en el teatro Cervantes.
El espacio escénico es atractivo en su eclecticismo. Emplazadas entre las doradas paredes de la sala del Cervantes, surgen unas columnas de metal. También algo escondido, un coqueto living decorado como en las revistas y una gran cama sobre una tarima. Una pantalla en el foro, varias cámaras con sus trípodes y sobre la izquierda, algo alejada de la escena, una sonriente operadora será la encargada de los planos. Los actores, con vestuario retro-almodovariano, conversan en coro cerrado.
Escuchamos al locutor citar a Blaise Pascal: “El arte de persuadir consiste tanto en el de agradar como en el de convencer; ya que los hombres se gobiernan más por el capricho que por la razón”. A poco de comenzar la obra sabremos que no se buscará “agradar” o “convencer”, mas bien se tratará de explorar las formas del capricho.
Aunque ya es un lugar común que prenda como pólvora un discurso paranoico sobre la inseguridad, que además resuma lo más reaccionario, xenófobo y discriminador de la sociedad y que los noticieros se nutran de las palabras de las “víctimas” como del pan de cada día. Sin embargo, en La percepción también se muestra cómo los medios prescriben un “buen uso” de ellos mismos. Un intangible “manual de la fama”. En este contexto, las imágenes del programa de Tinelli, se aprecian como un comentario sagaz al gran productor de este tipo de “celebridades”. Desde la dirección se buscó jugar las escenas desde la exterioridad, saturando la percepción del espectador con una enunciación enfebrecida de la teoría de la persuasión que obliga y anula al mismo tiempo el disfrute intelectual. El uso de la tecnología va en el mismo sentido, se impone por saturación. El resultado final implica un regodeo en lo más burdo del planteo, volviendo más inverosímil y débil la interesante hipótesis original.




Ficha técnica:
LA PERSUASIÓN
De Erika Halvorsen

Dirección: Luciano Cáceres
Con: Susana Cart, Cristina Fridman, Ignacio Rodríguez de Anca

Funciones: Viernes y Sábados 19hs - Domingos 18:30hs
Localidades: Desde $30.-
Teatro Cervantes - Sala Luisa Vehil (Salón Dorado)
Libertad 815 / 4815 8808


Publicada en Tiempo Argentino 04/10/2010